Recientemente un familiar me calificó de boludo porque siempre me levanto de buen humor.
Al comentar este hecho en presencia del Dr. Roberto Melchiori, desaprobó el calificativo y argumentó que mi postura era correcta pues de alguna forma al dormir morimos y al levantarnos resucitamos, y ese sólo hecho debería ser razón suficiente para el buen humor y la dicha.
Al rememorar esto, pensé que el año 2008 estaba llagando a su fin, mientras un nuevo año está a punto de nacer y con él nosotros. Que bueno sería levantarnos todos los días de buen humor pensando que nuestros gobernantes dedicarán todo su esfuerzo y efectuarán con honestidad su tarea por cumplir el juramento que hicieran al asumir su mandato.
¿Serían ellos boludos, o dignos de un respeto del cual hoy no gozan?
A todos los ciudadanos del mundo les deseamos unas Felices Fiestas y un Próspero Año Nuevo.
Un Abrazo
José Jorge Abdala
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